lunes, 30 de marzo de 2009

SEGURIDAD CIUDADANA

No bien acabo de salir de mi asombro leyendo la noticia sobre un joven que fue lanzado por un asaltante al mar mientras el delincuente continuó su fechoría violando a su novia, y recién acaban de asaltar la gasolinera Texaco que se encuentra frente a mi oficina. Lamentablemente la delincuencia no tiene un freno ni temor en estos momentos. Es la hora de que aprendamos a protegernos y entender que nuestro país no es el mismo de ayer, y mañana no será el mismo de hoy. El joven que murió lanzado al mar no creyó posible que en el lugar tranquilo donde se encontraba era posible encontrarse con la desgracia en manos de un sádico asesino y ladrón. Muchos negocios, como las gasolineras y los bancos, pretenden creer que todavía una vigilancia de quinta categoría puede disuadir a un grupo de delincuentes de la comisión de hechos delictuales en sus locales. Otra cosa es que en las escuelas y medios de comunicación la enseñanza sobre defensa personal y seguridad ciudadana es menos que nula. Por favor, tomemos medidas, que el asunto se escapa de las manos de las autoridades, pero nosotros podemos contribuir con nuestra propia seguridad.